Tus paquetes listos para enviar, transportar o almacenar. Nuestras cintas de embalaje se han diseñado para resolver cualquier problema relacionado con el empaquetado, y ofrecen una durabilidad y resistencia superior.
Cada una de nuestras cintas está diseñada con una finalidad concreta. Como las cintas de embalaje Scotch® de gran resistencia, extremadamente fuertes para mantener los paquetes intactos durante el transporte.
Aunque no es fácil, existen algunas formas de evitar o minimizar los daños. Es preferible utilizar sistemas de almacenamiento de plástico o metal, bolsas selladas al vacío y estanterías de metal, en vez de cartón o madera.
Las cintas de embalaje Scotch® soportan una cantidad moderada de humedad durante un breve período, pero no se han diseñado para resistir una exposición prolongada a la intemperie.
Sí, dado que contienen un adhesivo especialmente fuerte, las cintas de embalaje pueden dejar residuos al retirarlas. Puede que le interesen más las cintas adhesivas de enmascarado.
1. Retira el rollo de cinta anterior. Coloca el nuevo en el rodillo y aprieta hacia abajo. Asegúrate que al desenrollar la cinta, el lado del adhesivo queda mirando hacia abajo.
2. Desliza la cinta por el rodillo de mayor tamaño, el que está próximo al mango y pásala por el segundo, de menor tamaño. Algunos dispensadores de cinta de embalaje tienen una barra con muelle. Si es así, presiónala para pasarla con facilidad.
3. Tira de la cinta hacia el borde dentado.
4. Ya está, has colocado correctamente la cinta en el dispensador.
No. El color no tiene ningún significado. Los colores más habituales en las cintas de embalaje son el marrón y las de color transparente. Algunas cintas, enrolladas se ven de color y una vez que se aplican, quedan transparentes.